Pues por fin esta semana llegó la tan esperada presentación del iPhone 15 en sus diferentes versiones y el Apple Watch, también en sus diferentes características. Los amantes de la tecnología ya saben que la presentación incluyó mucha producción y en realidad los mismos anuncios de siempre: mejoras para la toma de foto, un procesador más avanzado, mejoras en rendimiento y seguridad, entre otros que en realidad ya nos esperábamos.
Y no, no estoy desanimándolos ni diciendo que no deberían comprar el equipo más reciente de Apple, lo único que digo es que estamos viviendo el periodo natural antes de un gran avance tecnológico, a mi parecer el último que vimos con los iPhones fue justo cuando cambiaron de procesador, lo que a unos cuantos años, ahora podemos ver que juegos que no podían instalarse en dispositivos móviles, ahora son totalmente funcionales en el iPhone 15 y si bien esto es un buen avance, no será ese anuncio que esperábamos. Para volver a soltar ese “wow” que tanto nos gusta podrán faltar un par de años más.
Tal vez no se hayan dado cuenta, pero Apple lo que comienza a hacer, es tener un ecosistema mucho más robusto que nos está generando una especie de dependencia de productos Apple, lo que quiere decir esto es que si te decidiste a comprar un iPhone después de muchos años de estar en ambientes Android, es muy probable que en poco tiempo cambies tu computadora, tu reloj inteligente y todos tus gadgets a los de Macintosh, esto debido a la facilidad de uso del ecosistema, si empiezas una nota en el celular la puedes continuar en la computadora sin necesidad si quiera de un aceptar o una acción por parte del usuario, con el simple hecho de abrir la misma aplicación en otro dispositivo, la información está disponible virtualmente de inmediato.
Y pues como recomendación les diría que se vayan decidiendo por su ecosistema favorito, Android o iOS y lo que esto conlleva Windows, MacOS, Android Watch, Apple Watch, etc. Esto lo comento porque cada vez estos ambientes de trabajo se van a ligar más y más hasta hacer que uno vea irrelevante trabajar una computadora Windows con un equipo con iOS y no porque vaya a ser difícil, por el contrario incluso eso lo van a hacer sencillo, pero las ventajas de usar todo en el mismo ecosistema serán aún mayores.
Punto y coma
Últimamente mucha gente me ha preguntado sobre la inteligencia artificial y no únicamente sobre su uso y las posibilidades sino también de los riesgos y posibles escenarios, mi punto de vista es que debemos estar muy cercanos al desarrollo de esta tecnología y ser cuidadosos, sus usos son múltiples y muy convenientes para labores del día a día, sin embargo, ya se ha visto que la IA puede llegar a fabricarse su propia información y que es una herramienta todavía con fallas y huecos que se irán solucionando y llenando poco a poco.
Más allá de todo eso, para mí lo más preocupante es que hemos hecho a un lado el uso de nuestras propias capacidades para dejar que la tecnología controle nuestras vidas, traten de llevar su vida un par de días sin dispositivos y vean lo que sucede, algo que en lo que ahora pareciera el muy lejano año 2000 era lo más normal, cuando mucho teníamos un celular capaz de enviar mensajes y hacer llamadas, pero nuestra vida no estaba dictada ni si quiera por la búsqueda constante de información en nuestros equipos de cómputo del tamaño que sean.
Así que mi recomendación es que busquemos crecer la inteligencia natural al mismo ritmo que crece la inteligencia artificial, de este modo tendremos una pequeña posibilidad de victoria ante la inminente llegada de SKYNET o como se vaya a llamar en la vida real.
Les dejo una recomendación musical para este mes que andamos muy mexicanos.
Nos leemos pronto.
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