Apenas arrancando el Gran Premio de Barhein de Fórmula 1 ocurrió un fuertísimo accidente en donde estuvo envuelto el piloto francés del equipo Haas, Romain Grosjean, quien tras el impacto vio su monoplaza prenderse en fuego.
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De acuerdo con reportes, el volante galo estuvo entre las llamas de su auto durante 30 segundos y de acuerdo con reportes de varios medios, Grosjean sufrió quemaduras en manos y posible rotura de costillas, que para las imágenes del accidente es un milagro (que se agradece), el hecho que esté vivo.
